Esta primavera el IEB mira hacia el sur de la península donde la bioconstrucción se abre camino poco a poco. Uno de los referentes es la asociación Caja y Espiga, con la que recientemente el IEB ha firmado un nuevo convenio de colaboración.

Caja y Espiga está formado por profesionales de la carpintería de armar, cuyo objetivo es fomentar la construcción con madera y materiales naturales, es decir, la edificación de viviendas, refugios u otras construcciones, realizados con madera y materiales de bajo impacto ambiental o ecológicos, reciclados o altamente reciclables, o extraíbles mediante procesos sencillos y/o de bajo costo.

La actividad principal de Caja y Espiga es la formación práctica en carpintería de armar, una de esas profesiones cualificadas tan valoradas en la bioconstrucción. Sus formaciones en diferentes formatos y para distintos públicos permiten desde tener unas nociones básicas del trabajo de la madera hasta convertirse en especialistas en el sector, desde unos criterios propios de la biología del hábitat. Su labor es “desarrollar y participar en acciones formativas, talleres, encuentros y cualquier otra actividad que fomente la construcción con madera; contribuyendo al desarrollo sostenible que no agote al planeta sino que sea generador y regulador de los recursos empleados, para conseguir un hábitat saludable, en armonía y respetuosa con todos los seres vivos.”

Según el convenio entre IEB y Caja y Espiga, el alumnado del Máster IEB podrá beneficiarse de un descuento del 10 % en las formaciones de Caja y Espiga.

Asimismo, el IEB ofrece un 10 % de descuento al alumnado y exalumnado del curso intensivo y la formación completa de Caja y Espiga en sus formaciones, tanto el Máster en Bioconstrucción IEB-IBN como en otros cursos.

“Toquemos madera” para que este convenio ayude a facilitar y conseguir una alta calidad en la construcción en madera, siempre con criterios de bioconstrucción.